Las plantas de interior, como es el ejemplo de nuestras suculentas, no solo añaden belleza y vida a un espacio, sino que también pueden ofrecer una variedad de beneficios para la salud. Las plantas interiores ayudan a mejorar la calidad del aire de nuestros hogares, esto es debido a su capacidad para filtrar y purificar el aire. Al realizar el proceso de fotosíntesis son capaces de absorver contaminantes y dióxido de carbono a cambio de liberar oxígeno.
Las plantas también son capaces de humidificar un entorno gracias a su proceso de transpiración, mediante el cual liberan vapor de agua. Este proceso es de lo más beneficioso para hogares o lugares con un entorno característicamente seco. Además, en ciertas épocas o estaciones del año, como en invierno, ayudan a regular esa sequedad en el ambiente tan característica de ese momento del año. Por otra parte, si su hogar consta de un sistema de calefacción centralizado, este tipo de plantas ayudarán así mismo a regular el ambiente seco que crean aquellos electrodomésticos cuando se encuentran funcionando.
«Las plantas son aliadas silenciosas que transforman nuestros hogares en oasis de paz, mejorando nuestra salud mental y elevando la esencia misma de nuestro entorno.»
ROGER SWAIN
Por otra parte, está demostrado científicamente que la presencia de plantas de interior son muy beneficiosas para nuestra salud mental. Vivimos en un mundo donde la presión en el trabajo y en el día a día están a la orden a diarios, pues, según estudios, tener plantas en casa nos beneficia a reducir el estrés y mejorar nuestro bienestar emocional.
De hecho, están relacionadas incluso con la capacidad de prevenir enfermedades relacionadas con el estrés. Muchas de las plantas de interior son capaces de absorber hasta los sonidos que provengan de fuera, por eso también ayudan a nuestro estado emocional y mental.
